Muchas veces imaginamos que el hecho de ir vistiendo casual es igual a ir desarreglados o en ropa deportiva ¡Nada más falso! Ir casual incluso a la oficina o a alguna cita no es sinónimo de falta de arreglo personal o de no estar en lo último de las tendencias.

No lo neguemos, todas batallamos a la hora de abrir nuestro armario y decidir que llevar para cada ocasión. No solamente pensamos arduamente qué ponernos para ir a un evento como una boda, sino que también en algunas ocasiones sufrimos cuando nos dicen que podemos ir vistiendo casual a la oficina y lo único que tenemos en mente son trajes sastres o pantalones de diseñador y blusas finas.

Cómo lograr un look maravilloso vistiendo casual

Puedes buscar la comodidad necesaria para el día a día y la carrera en la oficina, en la escuela o simplemente para ir a un mall sin que ello signifique dejar de un lado tu propio estilo e incluso el glamour. Si buscas mucha comodidad y no hay reglamentos de vestimenta en el lugar al que asistas, te recomendamos el estilo casual sport, que no quiere decir que vayas en tenis y playera todo el día.

De hecho puedes combinar tenis, pero con jeans y alguna blusa más elegante, quizás una camiseta haciendo juego con una chaqueta y sandalias o zapatos bajos. Recuerda que casual no quiere decir desarreglado, es una combinación de lo mejor de dos mundos: ropa cómoda y agradable con un toque más elegante, ya sea en la chaqueta, unos tacones, algún accesorio coqueto, etc.denim-dress-2038408_1280-compressor

Pero si eres de las que le gusta salir de la oficina para ir a cenar con tus compañeros o no te agrada tanto el hecho de ir de tenis o sandalias a la oficina, el estilo business casual es para ti.

Aún puedes combinar jeans pero no tan casuales, es decir, colores firmes, oscuros y no uses tenis. Lo combinas con una blusa y un saco y con accesorios sutiles y discretos. ¡Increíbles!

Además puedes utilizar pantalones de vestir o falda debajo de la rodilla y una blusa más formal, puedes añadir tacones y llevar tu cabello arreglado aunque sin exagerar, el maquillaje y tu perfume deben ser ligeros.

Por último llega el estilo casual formal, o business. En él si aplican trajes sastres o vestidos mucho más formales, peinados recogidos o un poco más elaborados, usar tacones ya es necesario y evita accesorios muy llamativos o grandes. Los aretes pequeños pero elegantes, un collar sencillo dependiendo el tipo y corte de tu blusa y una pulsera poco vistosa o incluso un reloj elegante lo harán muy bien.

A pesar de ello tu maquillaje debe ser súper natural, nada de mucha sofisticación. Con éste estilo estás lista para ir a juntas de negocios, cenas con clientes y en general eventos más importantes, aunque aún no sea una etiqueta formal tal cual dicta el código de vestimenta.

Cómo puedes ver no todos los códigos de vestimenta son iguales, y dependiendo la ocasión, tu puesto en el trabajo y con quienes estés conviviendo y el lugar al que vas, puedes jugar con tu vestimenta sintiéndote siempre muy fashion y adecuadamente arreglada estés donde estés.